Accidente cerebrovascular talámico en paciente pediátrico asociado a SARS-CoV-2

Resumen

Introducción. El ictus pediátrico es una de las principales causas de mortalidad en niños y se asocia con secuelas significativas en hasta el 50% de los casos, según estudios publicados. Un tratamiento agudo precoz, como la administración de activador tisular del plasminógeno o la trombectomía mecánica, mejora el pronóstico en casos seleccionados, reduciendo el riesgo de secuelas neurológicas.

Caso clínico. Presentamos el caso de un niño de 8 años que consulta por cefalea opresiva de inicio brusco, acompañada de déficit  motor en el hemicuerpo izquierdo, alteraciones sensitivas ipsilaterales y déficit visual. Ante la sospecha de ictus, se realiza una Angio-TC cerebral y cervical urgente que resulta normal. Posteriormente, la Angio-RM evidencia lesiones sugestivas de infarto agudo talámico derecho. En el estudio etiológico, se identifica una serología positiva para SARS-CoV-2 con títulos elevados de anticuerpos antiespícula. Se inicia tratamiento con corticoides intravenosos a dosis de 30 mg/kg, con buena evolución.

Conclusiones. El reconocimiento clínico temprano del ictus pediátrico es esencial para establecer un tratamiento adecuado y oportuno. La implementación de protocolos específicos para ictus pediátrico puede facilitar un diagnóstico preciso y mejorar los resultados terapéuticos.